Ante la pasividad de los responsables de la plataforma de Orange de Qualytel Teleservices, S.A., en peligro de extinción, nos hemos vuelto a concentrar reclamando en justicia lo que venimos pidiendo para nuestra compañera Ana desde Diciembre: El finiquito que le corresponde, tras ser ninguneada y explotada sin contrato en Qualytel, además de despedida sin previo aviso.
El tiempo nos ha dado la razón en cuanto a la estafa de trabajo de telemarketing que "guarrytel" ofrece: inestabilidad, despidos masivos e incluso limitación del derecho a la huelga. Al mismo tiempo, los bolsillos de ciertas personas se han engordado a costa de las subvenciones de la Junta de Andalucía. Todo ello con la actitud hipócrita del Comité de Empresa (UGT y CCOO) y con la complicidad de las empresas contratantes de Qualytel: Orange, Gas Natural, Salud responde, ING Direct.
No nos llevemos a engaño, Orange y el resto de las empresas contratantes son las que demandan la carga de trabajo (los 900, 902, 112 y 1474) que los patronos de Qualytel se encargan en servir en forma de explotación semiesclavista, para así aumentar sus pingües beneficios, disponiendo y echando a trabajadores como si de máquinas se tratasen.
Por eso denunciamos también a Orange, y no pararemos de concentrarnos a sus puertas hasta que le conflicto se resuelva, porque en definitiva Orange y Qualytel son carne del mismo hueso. Este hecho lo entendíeron perfectamente la gente de Puerto Real el pasado día 5: en todo momento se mostraba interesada en qué es lo que pasa en Qualytel, al tiempo que nos oían corear consignas contra Carmen Sales y los directivos de la empresa.
Si compras móviles de Orange, compras trabajo basura, compras estafa.
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